El Estado contra la publicidad de “comida chatarra” ¿es una buena idea?

Imagen

Siguiendo la tendencia de regulaciones contra la comida llamada “chatarra” adoptada por varios países, el año pasado se promulgó en el Perú la Ley Nº 30021, Ley de promoción de la alimentación saludable para niños, niñas y adolecentes (Ley de la comida chatarra), la cual si bien aún no es aplicable (porque se encuentra a la espera de la publicación de su Reglamento), trajo consigo varias críticas por su pobre evaluación de los efectos negativos que dicha disposición podría ocasionar en el mercado debido a las severas restricciones a la publicidad comercial que contiene, entre otras restricciones.

Como era de esperarse, dicha Ley -como la mayoría de normas peruanas que buscan intervenir en el mercado- no pasó previamente por el análisis del test de proporcionalidad o razonabilidad para justificar su promulgación. De haber pasado por dicho test, nuestros legisladores se hubiesen percatado que dicha norma carece de (i) idoneidad, pues las medidas que proponen para combatir el problema de interés público (obesidad, en un país en el que también hay un alto grado de desnutrición) carecen de justificación por lo que no se garantiza que puedan lograr el objetivo; (ii) no cumple con el requisito de necesidad, toda vez que antes de su promulgación ya existían medidas menos costosas para lograr el mismo fin, como son las normas que regulan la publicidad comercial y la protección al consumidor; y (iii) no cumple con el requisito de proporcionalidad en sentido estricto, ya que los costos de la norma son mucho mayores que los beneficios que pueda lograr.

De modo general, entre estos costos tenemos: la generación de una barrera de entrada legal para nuevos agentes económicos al establecer restricciones a la publicidad (con todas las consecuencias que trae en un mercado la reducción de competencia), reducción en la información a los consumidores, sobrecostos innecesarios que solo algunos agentes estarán dispuestos a cumplir (la Ley dispone la eliminación de las grasas trans en los productos bajo una justificación precautoria) pero que ello implicará un aumento de precios en los productos, lo cual evidentemente afectará a las personas con menos recursos, entre otros.

Como el espacio en este post queda corto para profundizar en la crítica de esta Ley, los invito a descargar en el siguiente link un artículo de investigación en el cual la analizo de manera exhaustiva:  

La “Ley de la comida chatarra”. Análisis acerca de su razonabilidad y el conflicto con las normas que regulan la publicidad

Un comentario

Deja un comentario